Fluralaner, el tatamiento más efectivo contra la infestación de ácaros en gallinas

Fluralaner

El fluralaner es un acaricida e insecticida de la familia de las isoxazolinas que ha demostrado ser un tratamiento altamente efectivo para combatir las infestaciones de ácaros rojos (Dermanyssus gallinae) en gallinas. Este parásito, conocido por afectar negativamente la salud y el bienestar de las aves, puede ahora ser controlado de manera eficiente con la administración de fluralaner a través del agua de bebida.

El fluralaner actúa como un inhibidor potente del sistema nervioso de los artrópodos, en particular antagonizando los canales de cloro dependientes de ligandos, como los receptores GABA y glutamato. Esta acción interrumpe el funcionamiento de los ácaros, eliminándolos y deteniendo su capacidad de reproducirse. La actividad contra los ácaros comienza dentro de las 4 horas posteriores a que los parásitos se alimentan de las gallinas tratadas. Además, la producción de huevos de las hembras de los ácaros se ve interrumpida durante los 15 días posteriores a la primera aplicación.

El fluralaner se administra por vía oral, mezclado en el agua de bebida de las gallinas, y su aplicación se realiza en dos dosis, con un intervalo de 7 días entre cada una. Tras este ciclo, debe mantenerse una pausa de 3 meses antes de iniciar un nuevo tratamiento. Este protocolo asegura un control continuo y efectivo de la infestación de ácaros rojos.

Los resultados de los tratamientos con fluralaner no solo eliminan los ácaros, sino que también mejoran significativamente el bienestar de las gallinas.

Entre los principales indicadores de mejora se incluyen:

• Disminución de la actividad nocturna de las gallinas, asociada con la presencia de ácaros.
• Reducción del rascado de la cabeza y el sacudido, así como del acicalado excesivo de las plumas.
• Disminución de la concentración de corticosterona en sangre, una hormona relacionada con el estrés.

Estudios de seguridad han demostrado que el fluralaner es seguro para su uso en gallinas ponedoras y reproductoras, incluso durante los periodos de puesta. Esto es crucial, ya que asegura la continuidad de la producción sin comprometer la salud de las aves ni la seguridad de los consumidores.

Para garantizar la seguridad alimentaria, se han establecido tiempos de retiro adecuados tras la administración de fluralaner. Para la carne de las gallinas tratadas, el tiempo de retiro es de 14 días, mientras que para los huevos, no es necesario un tiempo de retiro, lo que permite su consumo inmediato sin riesgos para la salud humana.

En conclusión, el uso de fluralaner en gallinas no solo combate eficazmente las infestaciones de ácaros rojos, sino que también mejora el bienestar general de las aves. Con un tratamiento adecuado y seguro, los productores pueden mantener a sus aves sanas y productivas, garantizando a su vez la calidad de los productos derivados de ellas, tanto carne como huevos.

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